Por: Yohel Amat
"No sé qué estará pasando en el "SyFy Channel" pero sea lo que sea, deben seguir haciéndolo ya que atrás está quedando la imagen de ser un canal con series "gallas" o "runchas", hechas con presupuestos de diez centavos. ¡Qué va!"

Para ejemplo les menciono tres nombres: Van Helsing, Aftermath y de la que les quiero hablar; Channel Zero.

Entonces, ¿qué tiene Channel Zero de especial y diferente?

Comencemos por lo bueno. La serie tiene una ambientación lóbrega y pesada, con la cual logra crearle a los protagonistas y al espectador un sentimiento de opresión y una sensación de que algo terrible va a pasar.
"La serie recurre a una forma confusa de narrar la historia ya que abundan los “flashbacks” y las pesadillas, con el problema de que a veces no sabemos que fue real o que fue un sueño".
También resiento que presentan muchos elementos sin dar una explicación clara de que es; cual es su objetivo y que tiene que ver con la historia.
Sin embargo, la antes mencionada atmósfera y unos protagonistas más que adecuados para la tarea, hacen que los defectos se vean disminuidos ante el festín que nos dan tanto a nuestra curiosidad como a nuestro ojos.
Y hablando de lo que vemos, allí es donde esta serie brilla. El corazón y eje del argumento es un programa de marionetas para niños que supuestamente solo lo pueden ver ellos, quedando afectados de forma maligna por el mismo.
Ver pedazos de esa “serie dentro de la serie" (“Candle Cove” se llama) es terrorífico, ya que las marionetas lucen inocentes pero a la vez son ominosas y todo su diálogo tiene un doble sentido que se puede interpretar como mensajes malignos para los niños. Y no de los que les mandan en Plaza Sésamo. Tienen que verlo para comprenderlo.
En la sección de monstruos hay varios, siendo el principal, la estrella de “Candle Cove”, Jawbone, un esqueleto pirata especializado en desollar. Además, hay un misterioso “niño dientes” que está cubierto, agárrense de la silla, ¡de dientes! Cientos de ellos, cuidado que miles.
Hay que verlo para entenderlo.
No les adelanto más, vean la serie y cuéntenme que les parece abajo en los comentarios. Y por favor: vigilen bien qué programas ven sus hijos. Ni por el diablo se les ocurra dejarlos ver “Candle Cove”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario